Hoy pensaba colgar un cartelito a manera de disculpa para la peña entusiasta que se la pasa haciendo f5 y mal que mal siempre se encuentra con algo nuevo escrito. El mes que viene, abril que ya está tocando la puerta, me absorberá en el cumplimiento de algunos deberes que vengo postergando con una pertinacia casi patológica. Pero hoy leo en Wimbledon este post, que no sé si es una despedida pero si lo fuera sería de las buenas, que hace que me detenga un momento a pensar: ¿tiene algún sentido seguir blogando si se terminan las Ultimas de Babel? |
Comments on "Intríngulis"
A mí me pareció una especie de evaluación, no una despedida.
Pero si lo fuera: seguir blogando, como se hace aquí, tiene todo el sentido, con últimas de babel o sin. Que no queden dudas.
No sep, no sep, yo también estoy evaluando, a ver qué vuelta se le encuentra a los desencuentros.
Lo pienso todos los días, pero me respondo que no paso al acto porque nadie lo notaría. Para dejar el mundo sólo hace falta un poco de notoriedad.
Yo lo notaría, Carlos. No tengo tantos placeres, y sería uno menos.
Estoy llena de ausencias. Entonces sería una más.
mmm... no creo que termine ese Babel y que tu Arcadia merme ya es un despropósito.
Hay que medir las fuerzas, Ayde, no son tantas.
Ojalá Babel nunca e acable, Silvia Sue, es una necesidad vital.
Sí, internet es el reino de lo efímero, cienveces. Aquí mejor que en ninguna parte queda desnuda la sensación de lo poco que somos.